Hurtigruten desvela su oferta gastronómica para este invierno
Hurtigruten siempre se ha esforzado por ofrecer a los huéspedes una experiencia local única y se centra en asegurar que productos locales se incorporen en la gastronomía a bordo. A través de su concepto culinario “Norway’s Coastal Kitchen“, el viajero descubrirá las tradicionales delicias culinarias de la costa y el interior de Noruega en un festival de sabores único a lo largo del bello recorrido de las 34 paradas de la centenaria ruta del Expreso del Litoral, que recorre la costa noruega de Sur a Norte y de Norte a Sur, “en el viaje por mar más bello del mundo”.
De hecho, Hurtigruten colabora con Innovation Norway y Matmerk (una agencia gubernamental que ayuda a impulsar a los proveedores con un segmento de mercado más pequeño) para identificar a empresas locales cuyos productos mejorarán aún más la autenticidad de la oferta culinaria a bordo. Más de 200 proveedores locales ofrecen todo un catálogo de productos y bebidas a la compañía, marcando una fructífera cooperación entre ambos.
Sede de uno de los barrios europeos más conocidos y más bellos de la Edad Media, el Bryggen (el Muelle), Patrimonio de la Unesco, la variedad cultural que propone Bergen – punto de partida de Hurtigruten – , se proyecta en los buffets elaborados con los mejores ingredientes de la tierra, entre los que destacan la sopa de pescado de Bergen, calificada por algunos historiadores gastronómicos del país como “la mejor sopa del mundo” o el “Western” noruego, un receta de ternera que data de finales del siglo XVIII. Continuando el viaje entre Ålesund, joya arquitectónica del Art Nouveau y Molde, la “Ciudad de las Rosas”, el barco propone un exquisito desfile de platos como el bacalao, la pierna de cordero de Hellesylt o un exquisito postre de manzanas asadas con helados, todos ellos productos de esta región de entrada a los fiordos, conocida como la mayor exportadora de bacalao desde el siglo XVII y donde se encuentra la producción comercial de manzanas situada más al norte del mundo.
Próxima parada: Trondheim. El “Hogar de los Troles”, como así se traduce el nombre de la ciudad, cuenta con alguna de las mayores atracciones turísticas del país como el Palacio del Arzobispo o la Catedral de Nídaros. Entre Trondheim y Rorvik, en la Costa Rocosa, los huéspedes disfrutarán de especialidades como la “paella” noruega, elaborada con granos de trigo duro, langostinos y rodaballo; o el Tjukkmolkspudding de Røros, un tradicional pudding de leche, elaborado con espino amarillo (rico en Vitamina C) y helado de aguardiente.
Atravesando la línea del Círculo Polar Ártico, entrando en la tierra del sol de medianoche en verano y las largas noches polares en invierno, el barco recala en Bodø, con parada posterior en Svolvaer, la capital de las bellas Lofoten. Aquí la herencia vikinga está presente en las formas de vida de sus habitantes, también en el aspecto culinario. El pasajero podrá degustar risotto con remolacha y cebada o el exquisito postre “Nyr” con tarta de chocolate y compota de bayas de Grondalen Gard, una granja orgánica donde se cría 19 vacas, basada en la viejas tradiciones lecheras y que ha desarrollado un queso fresco similar al Skyr que tanto gustaba a los vikingos.
Continuando la navegación Rumbo Norte, el barco recalará en Tromsø, la “capital del Ártico”, etapa donde el menú será un homenaje a los productos del Norte de Noruega, conocida como tierra estéril pero a la que sus habitantes han sabido sacarle provecho: la trucha ártica, las patatas “Gulloye” o moras del norte de Noruega serán los protagonistas. El barco discurrirá también por Skjervøy, en el corazón de los Alpes Lyng, gran productor de salmón, y alcanzará en la siguiente jornada el Cabo Norte, el punto más septentrional del continente, donde el pasajero disfrutará una selección de platos fríos y calientes en buffet que incluye diversas especies de pescado como el salmón, camarones o pez carbonero del Mar de Barents (cuyo fondo es muy rico en especies marinas), sopa de arenques o terrina de chocolate con arándanos.
Un auténtico festival camino a Kirkenes, la última parada del Expreso del Litoral Rumbo Norte, que brindará una carta con influencias rusas compuesta por sopa de remolacha, reno asado de Finnmark con pelmeni (una especie de pasta rusa) y Pavlova con bayas, un exquisito postre para poner punto y final a este viaje por los sabores noruegos.
Para más información visita: www.hurtigrutenspain.com