La República Checa promociona Pilsen y Kutná Hora en 2015
República Checa llega a FITUR con dos de las ciudades que brillarán con más fuerza durante 2015. Acércate al stand 4D12 y descubre Pilsen, Capital de la Cultura 2015, así como la hermosa Kutná Hora, que en 2015 cumple 20 años como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO
Más allá de la eterna belleza de Praga, República Checa llega a FITUR dispuesta a ampliar fronteras y horizontes con dos de las apuestas viajeras más destacadas del presente año: Pilsen, Capital de la Cultura 2015, y Kutná Hora, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde hace 20 años.
Pilsen, más allá de la cerveza
Más allá del amargo elixir que hace de Pilsen un lugar con denominación de origen, la ciudad comienza el año pisando fuerte. Y es que en 2015, sus calles vibrarán de modo especial como Capital de la Cultura. El programa dio comienzo este mes de enero con la actuación del insigne acróbata y equilibrista suizo David Dimitri. En febrero la ciudad se iluminará durante unos días con el festival de la luz, mientras en marzo se ha planificado la inauguración de la Fábrica de la Cultura en la antigua cervecería Světovar que, gracias a sus cuatro salas variables, se convertirá en espacio idóneo para el arte vivo, así como residencia artística de la comunidad de artistas locales. En abril los diferentes recintos de las fábricas de la ciudad se transformarán en espacios artísticos, durante el evento “Fábrica de la imaginación”; y en mayo Pilsen recordará el 70o aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial en las grandiosas Fiestas de la libertad.
Durante los meses de verano la música, el baile, el teatro e incluso los fuegos artificiales al estilo barroco tomarán las calles. Cabe destacar el festival multigénero CalleViva y el evento 9 Semanas de Barroco que se desarrollarán en la región Plzeňsko. Se trata de un extenso programa de arte vivo entre singulares monumentos de estilo barroco.
Durante todo el año renombrados artistas europeos del nuevo circo animarán las plazas y los barrios de Pilsen. En distintos distritos de Pilsen se levantarán mágicas carpas de circo en las que se presentarán números de ocho famosas compañías del mundo como el grupo francés Cirque Trottola o la compañía canadiense Cirque Alfonse.
No conviene olvidar las exposiciones temporales que acogerá la ciudad, desde la primera exposición exhaustiva de Jiří Trnka, que posteriormente se completará con la exhibición interactiva de su libro El jardín, hasta la valiosa colección de retratos maoríes de Bohumír Lindauer, pintor nacido en Pilsen a mediados del siglo XIX y uno de los insignes representantes del arte de Nueva Zelanda. Tampoco debemos perdernos la serie de exposiciones dedicadas a las obras de Ladislav Sutnar, uno de los fundadores del diseño gráfico mundial. La exposición dedicada a los mejores pintores de fin del siglo y de las artes modernas europeas, así como la exposición de arte barroco de Bohemia Occidental, completarán las exposiciones del año de la cultura.
Kutná Hora, 20 años como Patrimonio de la Humanidad
En 1995 la UNESCO reconocía la belleza y singularidad de Kutná Hora, incluyendo el casco histórico de la ciudad, la Catedral de Santa Bárbara y la Catedral de Nuestra Señora la Asunción en su lista Patrimonio de la Humanidad, circunstancia de la que hoy se cumplen 20 años.
Para celebrarlo, nada mejor que premiarnos con una escapada a esta ciudad minera cuyo casco histórico está formado por un pintoresco laberinto de callejuelas y plazas que se extienden de modo irregular. En las profundidades, bajo tierra, existe otro mundo subterráneo, con su red de pasillos, galerías y minas. La ciudad de Kutná Hora posee también uno de los panoramas urbanos más característicos, cuya vista más espectacular se puede disfrutar desde el valle del Vrchlice.
La magnificencia de sus edificios se debe a que en la era medieval Kutná Hora fue la segunda ciudad más importante del país, después de Praga. Las gentes más acomodadas de la época no querían quedarse atrás en comparación con las de la ciudad de Praga y por ello encargaban obras de envergadura a los artistas más sobresalientes del momento como Petr Parléř o Benedikt Ried.
El casco histórico de la ciudad se ha transformado totalmente en los últimos 20 años gracias a importantes trabajos de restauración: desde la Catedral de Santa Bárbara y la Catedral de Sedlec, hasta la Corte Italiana, la Iglesia de Nuestra Señora Na Náměti, la Iglesia de Todos los Santos o el Colegio Jesuita.
Conviene visitar el famoso Osario de Sedlec, uno de los mayores atractivos de la ciudad, ubicado en el cementerio de Sedlec, en la capilla subterránea de la Iglesia de Todos los Santos que, originalmente, formaba parte de una abadía cisterciense. Su decoración bizarra, formada por arañas, pirámides, cruces y blasones de huesos humanos, no deja indiferente a nadie.